El tamaño de tu bebé es de:
¡Ya nació!
Si el bebé no ha nacido todavía, no tardará mucho en enfrentarse a la vida, la semana 40 marca oficialmente el final del embarazo. Mientras los nervios y la impaciencia continúan apoderándose de ti y de tu pareja, tu cuerpo sigue preparándose para el momento del parto, ahora, el cordón umbilical tiene casi la misma longitud que tu bebé, los huesos del cráneo están separados por membranas que permiten que se desplacen, así como que su cabeza pase más fácilmente por el canal de parto.
El resto de su esqueleto se ha ido endureciendo durante todo el embarazo a través del proceso de osificación.
No obstante, los extremos de los huesos más largos y las puntas de los dedos de manos y pies siguen siendo de cartílago, algo que es necesario para que puedan seguir creciendo a medida que se desarrolla el niño.
En la semana 40 de embarazo, y pese a que el estómago del bebé ya está totalmente desarrollado, sus niveles bajos de ácido harán que, durante los primeros meses, solo pueda ingerir leche.
¡Felicidades!
¡Ya eres mamá o estás a punto de serlo! Nunca más serás la misma, serás infinitamente feliz.